“¿Ambicioso?”, le preguntaron el 1 de noviembre de 2020 a Rubén Muñoz Álvarez en el programa Tragaluz de Fernando del Collado en Milenio TV. El munícipe contestó “por supuesto”.

Quizá en su respuesta podemos entender la urgencia de posicionarse en medios de comunicación nacional, encuestas, espectaculares por toda la ciudad de La Paz o los miles de pesos gastados en redes sociales digitales. La ambición por la gubernatura lo tiene cegado y la crisis económica de la administración municipal quedó de lado.

Aquí la pregunta que surge, si el municipio está en crisis, ¿De dónde está sacando tanto dinero el alcalde de La Paz para promover su imagen? ¿Acaso hay algún personaje con tanto dinero para dárselo al desesperado político? Por supuesto, esto debería transparentar el gasto.

Muñoz Álvarez desde 2019 habló de un desequilibrio fiscal. Incluso, al inicio de la pandemia el político utilizó como pretexto la pandemia una y otra vez para subastar propiedades y hacer frente a la problemática de recaudación. Sin embargo, en estos últimos meses su promoción y su gasto se dispararon considerablemente.

Una prueba de ello, son dos anuncios pagados desde su cuenta de Facebook. El primero identificado con el numeral 346213283342548, promovido solamente para el 30 de octubre, al que le asignaron la cantidad de 10 a 15 mil pesos. El segundo registrado bajo el número 365797857967495 tiene gastado entre 10 a 15 mil pesos sólo por el 30 de octubre.

La estrategia de posicionamiento del presidente municipal va en contra de varias disposiciones de ley. Por ejemplo, el artículo 163 de la Constitución Política del Estado de Baja California Sur establece:

La propaganda, bajo cualquier modalidad de comunicación social, que difundan como tales, los poderes públicos, los órganos autónomos, las dependencias y entidades de la administración pública y cualquier otro ente de los tres órdenes de gobierno, deberá tener carácter institucional y fines informativos, educativos o de orientación social. En ningún caso esta propaganda incluirá nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público.

En el artículo 134 de la Constitución Política de los Estado Unidos Mexicanos también habla acerca de la promoción de funcionarios públicos:

La propaganda, bajo cualquier modalidad de comunicación social, que difundan como tales, los poderes públicos, los órganos autónomos, las dependencias y entidades de la administración pública y cualquier otro ente de los tres órdenes de gobierno, deberá tener carácter institucional y fines informativos, educativos o de orientación social. En ningún caso esta propaganda incluirá nombres, imágenes, voces o símbolos que impliquen promoción personalizada de cualquier servidor público.

En #NUESTRAOPINIÓNDEMIERDA creemos que don Rubén deberá transparentar todo el dinero público usado para autopromover su imagen, sin importar cuántas leyes viole, pensando en la famosa encuesta que realizará Morena para escoger al próximo candidato a la gubernatura. Don Rubén parece desesperado porque los número nada más no le dan y a huevo quiere ser él quien se lleve la tajada más grande del pastel, pero al parecer todo ese dinero que utiliza no servirá de mucho.